domingo, 6 de febrero de 2011

Calidad de vida y redes de apoyo

El número, tipo y calidad de las relaciones familiares y personales
son claramente distintos entre hombres y mujeres y puede
afirmarse, además, que estas diferencias,  se hacen más notorias
en la vejez.

Este hecho tiene su origen en los roles distintos que se

desempeñan en nuestras sociedades. Por ejemplo, la
participación laboral fuera del hogar, tradicionalmente más
prevaleciente en hombres, puede llevar a que ellos estén más
integrados socialmente en el ámbito externo, pero, al mismo
tiempo, permite que las mujeres desarrollen relaciones más
cercanas en el ámbito familiar y comunitario.   




Sin embargo, en ambos casos el inicio de la vejez implica un
momento de transición, coincidente con la salida de los hijos de la
familia, hecho que puede tener efectos negativos.  En las mujeres,
la pérdida del rol de apoyo y cuidado que se le asigna a la madre,
y en los hombres, el alejamiento o pérdida de los contactos en el
ámbito laboral. La forma en que se asume esta transición es
también distinta según el sexo.

Observaciones formales han dejado en evidencia en, que las
personas más apoyadas pueden hacer frente en mejores
condiciones a las enfermedades, el estrés y otras dificultades de la
vida.



Al respecto, es necesario subrayar que la efectividad del apoyo
social como potenciador de la calidad de vida depende de la
interpretación y valoración subjetiva que cada persona hace de
este apoyo.

Un apoyo innecesario, no deseado o erróneo, aunque sea bien
intencionado, puede tener efectos dañinos al producir
dependencias y afectar negativamente la autoestima.

ALGUNOS APOYOS FORMALES SON:







Gobierno del Distrito Federal:
Atención Ciudadana de la Secretaría de Desarrollo Social
Tel. 01 55 5141 7900     ext. 54805, 54807, 54815
demandasocial@sedesol.gob.mx
Lada sin costo
01 800 007 3705








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