Tiempo libre
Úsalo y diviértete…cuidando tu salud
Salir de vacaciones es una excelente oportunidad para relajarte, conocer nuevas personas y culturas, encontrar lugares exóticos, interesantes y divertidos y desde luego, disfrutar un tiempo con tu familia o amigos. Para lograr que las vacaciones no se conviertan en un problema o te dejen complicaciones posteriores es importante tomar en cuenta que a cierta edad el organismo requiere de ciertas precauciones especiales que nos permitirán gozar en mayor medida ese viaje que hemos planeado.
Así que aquí están algunas recomendaciones que quizá te sean útiles y que sin duda ayudarán a hacer de tus vacaciones un recuerdo inolvidable.
Independientemente de la manera en que viajes, es importante tener presente que el viaje es una diversión y se hace por gusto y placer por lo que no debe convertirse en fuente de angustia o estrés. Planificar todo con anticipación, reservar hotel, definir tiempos de salida y llegada, programar recorridos o actividades, preparar el equipaje con tiempo y llevar la vestimenta adecuada al clima del lugar son actividades que nos permitirán organizar mejor nuestro viaje. Aunque ir a la aventura pueda ser emocionante, para nosotros es mucho más cómodo tener la certeza de que dispondremos al llegar, de un lugar confortable para descansar.
Si padeces alguna enfermedad crónica, es conveniente asegurarse de que nuestro estado de salud es propicio para el viaje, realizar un chequeo médico previo puede ser una buena estrategia para evitar sustos, además de que el médico puede hacernos recomendaciones mas específicas sobre la alimentación y cuidados especiales durante el viaje. Lo mismo el preparar un pequeño botiquín con las medicinas que requerimos usualmente acompañados con la receta expedida por la autoridad sanitaria (sobre todo si viajas en avión). Es recomendable llevar un poco mas de la medicina que utilizas por si el viaje llegara a prolongarse por alguna razón.
Si viajas en avión:
ANTES DE SALIR
· Elegir vuelos en la mañana, ya que los pilotos suelen estar mas frescos y despejados
· Evitar viajar en las líneas aéreas que venden boletos muy baratos ya que pueden estar en crisis financiera y baja los cuidados que otorgan a los aviones.
· Una semana antes del viaje, intentar caminar 30 min. Diarios, aumentar las horas de sueño y disminuir el cigarro, café y alcohol.
· Dejar libres las 24 horas previas al vuelo con el equipaje listo. Recuerda la conveniencia de viajar ligero. No siempre habrá quien cargue el equipaje, de manera que empaca sólo lo que puedas transportar fácilmente y que no implique realizar esfuerzos que puedan provocar lesiones y arruinar el viaje.
· Si necesitas candados, cómpralos con combinación numérica en vez de llave, por si la pierdes. La combinación la puedes apuntar en tu cuenta de correo electrónico y mandarte un mensaje.
· Llevar copias de toda tu documentación en la maleta o escanearla y mandártela por correo.
· Elegir asientos cerca del pasillo o de las salidas de emergencia. Conviene también sentarse del ala hacia adelante, donde los movimientos y los ruidos son un poco menores.
· De preferencia no utilizar tacones altos, preferir zapatos acordonados y con suela de goma. Utilizar ropa cómoda y de algodón, no sintética.
· Ir al baño antes de abordar ya que puede tardar hasta media hora para que podamos desabrochar los cinturones.
· Tener pensamientos positivos.
DURANTE EL VUELO
· Comer poco en el avión
· Tomar 1 vaso de agua por cada hora que dure el vuelo, por el aire seco de la cabina y para diluir la adrenalina circulante en la sangre.
· Tomar una aspirina cada 12 horas, para prevenir el Síndrome de la Clase Turista (trombosis en miembros inferiores). Si existen antecedentes de gastritis, tomar aspirina con protección gástrica.
· Mover las piernas, intentar estirarlas durante el vuelo e incluso caminar por el pasillo.
· Quitarse los lentes de contacto y/o colocarse lágrimas artificiales, porque el aire seco suele irritarlos.
· Escuchar música tranquila de los canales de audio, la música clásica y la new age tienden a nivelar la actividad eléctrica cerebral.
· Proveerse de la mejor distracción posible, libros de chistes, revistas con fotos, crucigramas, etc.
· Dejar debajo del asiento una bolsa blanda pequeña con todo lo necesario, incluir una linterna pequeña, chicles para destapar los oídos, papel para escribir, una botella de agua, antifaz para cubrirse los ojos, crema hidratante para evitar la sequedad de la piel causada por el ambiente seco, etc.
· Si hay turbulencia, colocar la almohada, manta o un abrigo doblado sobre el abdomen y ajustar fuertemente el cinturón de seguridad, a la manera de una faja que sujete las vísceras, para disminuir de esa forma la sensación desagradable de los movimientos gravitatorios y antigravitatorios. Recordar que la turbulencia es solo incomodidad, no reviste ningún peligro para nosotros o para el avión.
· Si te sientes ansioso, llama a la azafata y comunícale tu situación y que puedes requerirla para pedir ayuda o información. Si algún ruido o maniobra te sorprende, no dudes en preguntar.
· Frente a la ansiedad, ayuda mucho la respiración controlada: contar las respiraciones, intentar alentar el ritmo, hacer pausas entre inspiración y espiración tratando de que el tiempo de salid del aire sea mayor que el de entrada.
Lo mas importante es tratar de relajarse y pasarla bien teniendo ante todo una actitud positiva.
¡Felices vacaciones!
No hay comentarios:
Publicar un comentario