domingo, 5 de mayo de 2013


LA  TOMA DE  DECISIONES EN EL
 ADULTO MAYOR





(Fragmento tomado de publicación hecha por la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología)

El envejecimiento se asemeja a una línea del tiempo, en la que, de manera ininterrumpida, cada persona debe tomar decisiones, desde las muy sencillas como: Qué ropa me pondré hoy, hasta otras de vitar trascendencia.

Toda nuestra vida es una cadena de encrucijadas:  Decido un camino y en automático estoy renunciando a otra opción. En ocasiones acertamos y en otras no, pero siempre obtendremos un aprendizaje, y además: 

 *EXPERIENCIA. Que servirá de base para una buena decisión futura.

• BUEN JUICIO. El sentido común y la madurez conseguidos con el paso de los años son nuestros mejores aliados.

• AMPLITUD DE MIRAS. Todo lo pasado a lo largo de nuestra vida nos hace saber que no hay una sola manera de ver las cosas.


CÓMO AFRONTAR LA TOMA DE DECISIONES

Lo primero que hay que hacer, es pensar de una forma positiva

acerca de nuestra capacidad para decidir.

Pensar de una manera positiva nos ayudará a:

• Ver las cosas como retos, como DESAFÍOS.

• Saber que siempre se puede hacer algo ante los problemas.

• BUSCAR SOLUCIONES, solos o con ayuda.

• Sentirnos mejor con nosotros mismos, más capaces, más seguros.

Recuerda que una ACTITUD POSITIVA nos predispone al éxito.

                                                                                    

LO QUE HAY QUE HACER PARA TOMAR DECISIONES: N   Unas cuantas recomendaciones que podemos seguir para hacerlo del mejor modo posible. Es importante que las sigamos en el mismo orden que las exponemos.

• SER lo más CONCRETO posible. Hay que analizar y encontrar

cuáles son las cuestiones importantes y cuáles no.

• Buscar soluciones. Se trata de ver todas las POSIBILIDADES

existentes en relación con la cuestión que hemos de resolver.

• ELEGIR la solución que más nos convenga para lograr el resultado que buscamos.

• Pasar a la práctica. PONER EN MARCHA nuestra decisión.

• COMPROBAR cómo nos ha ido, para rectificar en caso de que los resultados no hayan sido los esperados.

                                                                

Vamos a poner en práctica las anteriores recomendaciones ante una situación de duda e inseguridad que sufrimos frecuentemente al hacernos mayores: ¿QUÉ VOY A HACER EN EL FUTURO?

• SER CONCRETO.

Preguntarse “¿Qué voy a hacer en el futuro?” es plantear el

problema de manera demasiado general e inabarcable. Hay que

concretar más: “¿Dónde quiero vivir? ¿Con quién? ¿Cómo quiero vivir?”. De cómo responda a estas cuestiones, dependerá mucho mi vida.

• BUSCAR SOLUCIONES. Ponerse en situación de cada una de las alternativas y VALORAR PROS y CONTRAS:

“Si voy a una residencia tendré que dejar mi barrio y me costará más dinero, aunque estaré más segura y cuidada. Si vivo en mi casa seguiré siendo independiente aunque me sentiré más sola.”


DESPUES… ACTUAR

• ELEGIR. Si lo que valoramos es continuar siendo autónomos,   elegiremos vivir en la propia casa. Esto implica tener que pedir

y aceptar ayuda de vez en cuando de vecinos, servicios sociales, amigos y familia.

• PASAR A LA PRÁCTICA. Una vez hecha la elección hay que

preguntarse qué se necesita para llevarla a cabo.

Habla y pide consejo a tus familiares. Haz gestiones, solo o con

ayuda para conocer los servicios sociales y las ayudas que puedes solicitar para tener una vida más confortable y segura.

• COMPROBAR. Por último, debemos preguntarnos si hemos

conseguido lo que queríamos. Puede pasarnos que obtengamos ventajas que no habíamos previsto.

Puede ocurrir también que la decisión no haya resultado tan buena como esperábamos. Es el momento de introducir cambios.

Los pasos que hemos ido dando nos ayudarán a saber dónde y

quién nos puede ayudar a hacerlos.         

1 comentario:

Anónimo dijo...

es muy interesante saber que existen muchas formas para elegir un camino, para tomar decisiones ante ciertas situaciones, ya que para algunas personas adultas se les es difícil tomar una decisión por el simple echo de que se creen incapaces de hacer las cosas bien, otra de las cosas que les impide tomar una decisión son aquellas criticas que fluyen a su exterior, es importante saber que la decisión que uno tome es para estar y sentirse bien con uno mismo en todos los aspectos y con el fin de sentirse bien y que en todo momento siempre habrá quien te apoye.
y estar consiente que todo tiene una experiencia para aprenderse.
Viviana Ugalde Sánchez
administración 2.2 uaeh